En el mundo, cada minuto muere una mujer víctima del cáncer de mama. Razón suficiente para sumar esfuerzos en pro de la detección oportuna de esta enfermedad, esfuerzos que se ven multiplicados durante el llamado “mes rosa”. Pero, ¿por qué en octubre? ¿cómo es que nace este importante movimiento?
Todo inició en octubre de 1983 cuando se realizó por primera vez la “carrera para la cura” en Dallas, Texas. Evento organizado por la fundación Susan G. Komen e identificado como el primero que promovió en las calles la sensibilización acerca de este padecimiento. En su primera edición reunió a cerca de 700 corredores, entre ellos mujeres que habían ganado la batalla contra esta enfermedad. A la fecha, la carrera se lleva a cabo en distintas partes del mundo, haciendo partícipes a más de un millón de personas.
En el mismo mes pero dos años después, una importante empresa farmacéutica productora de medicamentos contra el cáncer de mama, fundó el National Breast Cancer Awareness Month (NBCAM) cuya misión es crear conciencia de lo importante que es la detección temprana de esta agresiva enfermedad.
¿Qué sería de esta iniciativa sin su característico distintivo? La creación del listón rosa se le atribuye a Evelyn Lauder, quien después de ser diagnosticada con cáncer de mama se alió en 1992 con Alexandra Hennem editora de una revista y juntas crearon el moño, el cual se adoptó rápidamente como el símbolo de la lucha. La reconocida empresa líder en cosméticos que pertenece a su familia ha repartido más de 115 millones de listones rosas y su fundación Breast Cancer Research Foundation proporciona tratamientos integrales a mujeres con esta enfermedad.
Las acciones e inspiración de estas y otras organizaciones han fortalecido los esfuerzos logrando impacto a nivel mundial. Todo ello con el firme propósito de sensibilizar a hombres y mujeres de que la detección oportuna proporciona la posibilidad de curación en 98 de cada 100 casos.
No existe una fórmula para mantenernos exentas de la enfermedad, nuestra mejor arma es la adecuada autoexploración, hábitos de vida saludables y las revisiones médicas correspondientes.
Queda mucho por disfrutar ¡Vivir está en tus manos!